martes, 5 de noviembre de 2013

La Familia Definitiva y Definitoria.

"Cuando las familias individuales han aprendido la bondad,entónces la nacion entera ha aprendido la cortesia"
  Confusio.

       En los finales de los 70´s mi mamá resolvió rehacer su vida sentimental y encontró al hombre ideal en un colega de trabajo de nombre Sergio Aedo.Yo lo habia visto en los pasillos del "Ministerio"(ministerio de comercio interior) en una de las tantas visitas a la oficina de mi mamá.pero sobre todo lo recuerdo jugando soft ball en el Nautico.Ahóra lo veia de visita en mi casa.
No pasó mucho tiempo antes de mudarnos para Oquendo 483 esq a San José,por supuesto Centro Habana y ya andabamos por 1978.
Comparado con la "ferreteria-vivienda" que dejabamos después de casi diéz años,el nuevo apartamento parecia chiquito,pero era indudable que estaba bien estructurado de manera que cada cuarto de dormir o espacio cualquiera no interferia con las demás piezas.Tenia además un balcón,pero no ofrecia gran cosa,el etorno era decadente y monocromático y hasta una multa le costó a mi mamá por atreverse a afear el ornato,creo que por unas cajas de refresco que colocó en ese balcón.Muy estricto tiene que haber sido el sentido de armonía ornamental de quien puso la multa para que un par de cajas de refresco en un segundo piso le resultaran imprudentes en medio de aquél paisaje, pués viviamos en la cuadra del solár "El Africa".
Aqui ya Sergio Aedo aparecia con más frecuencia y con más sentido de "lider",sobre todo en eso de hacerse cargo de casi todo y a veces de todo.La primera actividad que hicimos juntos fué cargar agua.Hubo una rotura en la bomba de agua del edificio y nos abasteciamos del liquido en una "llave publica" a dós cuadras de distancia,una vecina con rostro sacado de las pinturas de Fabelo nos facilitaba una carretilla donde poniamos nuestros cubos y comenzaba así una tarea que podia durar dós horas.No era solo la distancia a recorrér para lográr el agua,sino el subir los cubos hasta el apartamento.Lo peór era que la actividad se realizaba invariablemente los fines de semanas o días festivos y yo estaba en edád de fiestas y mas fiestas y alguna que otra véz no estuve dispuesto para la tarea del agua,de regreso a la casa ya de madrugada comprobaba que Sergio la habia cumplido integra el solo,uno sentia cierta pena pero tambien cierto alivio al saber que "el mundo no dependia de ti".Aquella gesta duró entre dós y trés meses y por ser Centro Habana,se hizo bajo un apagón más de una véz.
Hasta aquél momento yo a lo que más llegaba era a hacer mandados,desde la casa de Espada iba al Mil Cinco de San Lázaro(el de Hospital,no el de Marina) y a la panaderia "La Candeal",de tanto ir me aprendí el número de la libreta,el 695.Las colas en la Candeal los domingos eran como para suicido,yo con diez u once años hubiera firmado un pacto de no comér nunca más pan en mi vida si algun sér sobrenatural me libraba de aquellas colas entre gente fea y rara.
Habia otra actividad que hoy pudiera parecer comica pero que en la época era bien extendida,"buscar hielo",se refiere a gente como nosotros que no tenian refrigerador pero que no por ello renunciaba a tomar agua fria(mi mamá toma el agua bien fria y el café bien caliente) durante las comidas,entónces iba yo a una casa situada en Vapor esquina con Marina y desde un piso alto me llegaba el hielo en una jaba,no recuerdo el nombre de ese buen vecino,pero no he olvidado el del viejo matrimonio de peninsulares que vivia en Jovellár y que siempre nos trató con mucho cariño.El senór creo se apellidaba Dupré,Jufré o algo así y ella era simplemente Concha.
El caso es que la aparición de Sergio Aedo en mi vida vino como anillo al dedo en eso de "hacerse cargo" de cuanto hubiera que enfrentar en el hogar,más de treinta años han pasado desde aquella primera tarea y todavia hoy se depende de él,desde una paréd por pintar,una jaba de boniatos hasta el lustrado de los zapatos de la escuela de Leila.
Há traspolado su militancia ideológica a los confines de la casa y la familia,una sola vóz y un unico orden,o estás con él o contra él,creyó,al iguál que el Estado cubano,que podia hacerse cargo del contról de cualquier actividad por minima que fuera y creó un mecanismo que lo hacia responsable por decreto de cada movimiento que se produjera dentro de los confines de la casa.Ya cumplidos los setenta no era raro verlo encaramado en una escalera altisima y peligrosa pintando un techo a cuatro metros de altura y diez minutos después verlo caminar a toda prisa para recoger a Leila en la escuela.
Lo que más nos ha separado son conceptos,considero su militancia incompatible con un ambiente familiar y muy nociva a la hora de su relación con el mundo,un mundo un póco más reál y plurál que habita más allá de las fronteras de un Cominté del Partido.Imponér e imponerse con una ideológia en un medio hogareño es nefasto para el trato sincero y abierto entre los miembros de esa familia.Se abre un espacio de magnitudes inmensas entre quien se impone y quien no tiene derecho a ser escuchado y un buen día y alrededor de la mesa del almuerzo descubrimos-ya con amargura y dolór- que no somos ni fuimos esa masa monolitica portadora de una sola fuente de pensamiento politico y sociál que habiamos hecho creér al "jefe" que ya en su otoño vital y cansado se entera que su hijo mayór es testigo de Jehová y su hija milita en una partido de extrema derecha que promulga el aniquilamiento de judios,turcos y negros que degeneran la virtúd de la raza.Tál véz el ejemplo sea drástico,pero posible en muchas familias.
La familia tiene otro concepto,es el espacio primario de toda sociedad y desde ella se edifican valóres y tambien ese deber y derecho sagrado que indica "decir lo que pienso con respécto a lo que ocurre allá afuera,en ese país que resulta que tambien es mio y no exclusivo de un puñado de hombres con militancia".Cuando se pretende hacer funcionar un hogar en semejanza a un gobierno se corre el riezgo de irse corroyendo a la par de ese gobierno hasta tanto llegue el fin inevitable.
Mis condúctas fueron reprobables en muchos ordenes y de ellas escribiré más adelante,pero créo que no lo hubieran sido tanto de haber yo tenido un papél "más activo" en la sociedad socialista.
Diferencias aparte,créo que Sergio llegó para quedarse y el hacerse cargo de la "nave" nos libró a todos de muchas preocupaciones y desabastecimientos.
Es bueno sentarse con el a vér un partido de beisbol,nadie,absolutamente nadie,
conoce ese deporte como el, puede anticipar jugadas,lanzamientos del pitcher y muchas veces el comentario de los narradores deportivos llega tarde con respécto a los que ya el hizo varios segundos o minutos antes.Nació en Cienfuegos pero se crió Almendarista y trasmutó en Industrialista,pocas cosas lo emocionan o lo depirmen tanto como Industriales con sus triunfos y fracásos.Hace un par de semanas me dieron la desagradable noticia de que habia sufrido una caida y que se habia golpeado mucho el rostro,al parecér le habian bajado mucho los niveles de azúcar en sangre y le provocó una perdida de fuerza y balance,pero era una noticia bien rara viniendo de un tipo al que jamás hemos visto enfermo o con padecimiento crónico alguno,cosa lógica en alguien que jamás fumó,bebió alcohól ni se extralimitó en la concupiscencia.Pero si alguna véz se le queria vér cerca del paro cardiaco,solo habia que observarlo frente a un juego de volley ball,una pelea de boxéo o por supuesto un juego de pelota,sus manos mas que aferradas a los brazos del sillón mientras se recuesta en extremo y una coloración blanquesina y hasta babeo denuncian algo grave,pero no,sale ileso de cada partido y cada pelea.
Donde olvido todas nuestras diferencias y hasta le rindo sentido homenaje a Sergio Aedo es en haber dedicado su vida a la atención buena y sana de mi mamá y en haber sido la figura vertebrar en la vida  de mi hermana.Para con ambas ha sido pilar indiscutible de sus respéctivas fortalezas en cada estadio de la vida,jamás les ha fallado y créo que se siente bien en ese papél.Para con Leila Patricia ha llegado a limites de servilismo que rozan en la amorosa esclavitúd.Nadie pudo imaginar que ese hombre se disfrazara de payaso para complacér a la infanta en uno de sus cumpleaños,ni siquiera la niña misma se creyó aquéllo y protestó llorosa cuando vió a su "paterna y fuerte" figura con pelucas y naríz postizas.
__"Ese no es mi abuelo!!",gritaba a todo llanto.
Antes que comunista consagrado,Sergio Aedo fué dependiente de tiendas de ropa,de ahí que siempre vista correctamente y de limpio,conoce de combinaciones y de "pintas",jamás se pondrá unas sandalias que dejen vér su piés.."eso es de gente enferma,gente con hongos o algo asi"-dice.
La mesa es su "campo de batalla" y como buen guerrero con ella sueña y a ella vá dispuesto,no habrá para él reposo y jamás acatará la orden de "retirada!"..la batalla terminará solo con el ultimo soldado muerto.Come de todo y sus ojos se dejan comér por todo,pero rechaza la harina y el boniato alegando que le recuerdan el "Machadato"(presidente Gerardo Machado,1925-1933) cosa curiosa pués Machado huyó a Bahamas expulsado por un levantamiento popular en Agosto y Sergio nació en Septiembre,cosas de la vida.
En el popular show de titeres de Jim Henson,"The Muppet Show",aparecia "Sam the Eagle" que por su movilidád y contról estricto de cada situación yo relacioné con Sergio.Lo que no era justo era ese nombre de "Sam el Aguila",demasiado norteamericano para un revolucionario,entónces opté por uno menos ofensivo,"El Gallo" que perdura hasta nuestros dias.
Al igual que mi mamá,Sergio Aedo era viudo y tambien tenia dós hijos.En febrero del 81 nos fuimos todos a vivir juntos a un apartamento que aún sirve de cuartél generál (y refugio en caso de exilio forzado) ubicado en Santa Marta 517.LLegaron entónces Sergito y Alexander Aedo y la cosa se hizo más divertida con estos nuevos muchachos a los que siempre apunto en el casillero de la familia cuando lleno algun formulario mental o relato una historia familiar.