jueves, 10 de octubre de 2013

La Educación,La Escuela y yo.(1)

   "Mientras vivas,sigue aprendiendo a vivir"
                                       Séneca.


   Nunca fuí un niño de esos que llaman "tranquilos".Unos doce elementos quimicos se encuentran e interactuan en nuestros cuerpos,el oxigeno en mayór proporción,carbono e hidrógeno le siguen en porciento.En mi caso,se llega a creér que en algún momento mi quimica se cruzó con la fisica y la energía nucleár,yo era un niño hiperactivo,incontrolable e incontrolado,con una necesidad de movimiento constante,involuntario a veces.Sentarme o detenerme por mucho tiempo era como morir.Estos desajustes incidieron en mi aprendizaje,no prestaba la atención necesaria al maestro y practicamente no retenia nada de lo explicado por este e incluso ocurria lo mismo trás habér leido un texto en un libro o un  manuál didáctico.El maestro de turno discurria sobre temas geógraficos,de biología,quimica,fisica o se empeñaba en ayudarnos a comprender y resolvér ecuaciones matematicas,pero mi mente estaba obstruida por una pelota y se preparaba para corrér y caminar el próximo espacio del mundo,juego y movimiento.Pésimo (no malo) alúmno al que el sistema de eduación  desde muy temprano dió por insalvable,sepase que casi nunca logré aquél 70% que servia para el aprobado y que mi historia de repetir grados comenzaria en el quinto.Un bicho raro,un "chiquito medio lóco y retardado" al que los maestros enfrentaban con extréma rectitúd,compadecimiento o simplemente indiferencia.La primera la combatí,la segunda la agradecí y la tercera la aplaudí hasta el delirio.
   Ya  conté que anduve con un inmenso yeso en el brázo izquierdo por mucho tiempo,mucho más del necesario,pero aquél donjuanesco técnico que me lo enyesó mientras enamoraba a mi tia lo habia hecho mal y quince dias después el dolór continuaba.Entónces resolvieron llevarme a un especialista en estas materias,era un ortopédico de renombre en el hospital Frank País,era de Cardenas y amigo de mis padres,se llamaba Cuco Herrera.El dr Herrera inspeccionó en brazo y descubrió que lo habian enyesado mal y que iba por mal camino,entónces me dijo:
 ____Reinaldito,tendremos que fracturarte el brázo otra véz para colocar los huesos en el lugar correcto y que suelden como debe ser con un yeso bien puesto,de lo contrario habrá que operar.Esto te vá a dolér un poquito.
   Track,asi sonaron los huesos trás la "nueva" fractura"..mucho dolór,pero ya.Otro yeso inmenso y otros cuarenticinco dias de incomodidades.El calór y la humedád del clima cubano son enemigos de la piél mucho más cuando se porta un yeso,produciendo una picazón a veces insoportable,la gente lo combate con cubiertos,palitos chinos y cuanta varilla alargada tengan,yo pretendi calmarla con una peseta.Me mandaron a buscar el pan,debia portarse una libreta de abastecimiento y bastaba con una moneda de veinte centavos,la peseta.De camino a la panaderia comenzó la picazón,muy cerca del borde del yeso que termina en los dedos de la mano,lo unico que encontré fué mi peseta y con la punta de mis dedos la introduje por la ranura entre el yeso y la piel para poder rascarme,pero se me fué la dichosa peseta y mientras más intentaba recuperarla más se me iba yeso adentro hasta llegado el punto en que mis dedos ya no podian tocarla.Regresé a la casa y pedí otra peseta con el pretexto de haberla perdido en el camino y nunca más hablé del tema.Pasáron las semanas y llegó el momento de retirarme el yeso,en la sala de espera del Frank Pais eramos trés niños con idéntica situación,brazo izquierdo enyesado.Se nos tomó rayos X y se nos pidió esperar afuera,al rato salió el tecnico con una placa en la mano y con asombro preguntaba "cuál de ustedes trés tiene un objeto dentro del yeso?"...la pregunta era para todos por iguál,pero yo sabia que era conmigo,todo el mundo me miró,los niños,los padres delos niños,los medicos,la señora que limpia,en fin,el mundo entero.Todos asintieron en una oración:  "Seguro que fué este,mira la cara de maldito que tiene.."
Mi mamá apenada me preguntó y créo que ahi le dije que si.Entónces abrieron el yeso y se vió la peseta incrustada en la carne semi podrida y verdosa en medio de una brazo churroso tras mas de dós meses sin agua y jabón,velludo y flaco de tanta inmovilidad.
Aquella cara de maldito que vieron en mi en aquél hospital es la misma que vieron mis maestros a lo largo de mi vida estudiantil,pagué por eso hasta por lo que no hice,siempre estaba entre los sospechosos y muchas veces entre los repudiables.Recuerdo maestros a los que le produje asco y una perversa repugnancia.
    La escuela era mi enemiga,me frustaba el tiempo libre,los profesores eran testaferros de tal engendro y nunca pudimos vivir en armonia.Algúnos me vencieron,incluyendo  uno de ellos que cogió por el cuello y estuvo a punto de golpearme contra una paréd (fué culpa mia),pero por la inmensa mayoria sentí una mezcla de desprecio,compasión y lastima.Solo una maestra es recordada por mi con cariño,se llamó Gladys Acosta y nos quisimos por muchismo tiempo.
   A los doce años volví al regimen de becas,venticuatro horas a la semana con tu familia,el resto del tiempo entre cuatrocientos adolecentes en pleno desarrollo con los que compartias vida,estudio y trabajo.Para la inmensa mayoria aquello era duro,venian de sus casas y de sus juegos y los esperaba una litera y una guataca.Pero estaba de moda y por una rebaja módesta en la libreta de abastecimientos se presentaba como una atractiva opción para la eduación de los hijos,los padres tendrian asi más tiempo para su trabajo y sus vidas privadas mientras el estado garantizaba la formación de sus vastagos.
 Mucho se há hablado,escrito y denunciado acerca de estas escuelas y las historias tienen que sér tan diversas como los millones de alumnos y profesores que por allí pasaron.El sistema de becas fué un reflejo de Cuba en cada etapa,Surgimiento y Apogeo y mas tarde Descontról, Insostenibilidád,Desmembramiento y Fin.
  Yo saldria finalmente del sistema de becas cubano en el 1978,mi ultima beca fué de corte militar (Los Camilitos),yo ya sabia marchar,habia aprendido desde los ocho años pero esta escuela no solo exigía una ferrea disciplina sino además un elevado promedio académico generál (85 puntos) y yo solo conseguí un raquítico setentialgo.Además,mi condúcta no era la mejór y abandoné un desfile militar en una fuga espectacular que terminó en captura y expulsión del centro.El director de la escuela, Capitan Angúlo,escribió horróres en mi expediente escolár.Era un tipo recio,moldeado en el rigor de la vida militar y no vió en mi la entereza necesaria para un futuro soldado de la patria.El Caiptan Angulo,ya con los grados de Teniente Coronél se pegó un tiro (en la cabeza?) menos de diez años después.
  Maldades hice muchas en estos años becados,lo peór que aprendí fué a fumár y me arrepiento de tanto humo.Robé comida en almacenes y robé exámenes que se impondrian al dia siguiente.Solo cien metros separaban al dormitorio de las aulas,sin embargo yo podia está una semana entera sin aisitir a estas.Desde mi litera (en los bajos durmió Augusto,el cantante de Moncada) escuchaba los matutinos en los que mi nombre se pronunció no pocas veces,siempre acompañado de amenazas.Fuí expulsado de más de trés escuelas y una ni siquiera se dignó recibirme al vér el expediente escolár que portaba.
Al sér expulsado del Pré del Vedado (Saúl Delgado),la directora (Andrea) a manera de doble castigo me quiso enviar al pre de Alamar!!..entónces decidí buscarme yo mismo el traslado y con el expediente escolar en mis manos y la ayuda del un profesor conocido (Ricardo Jacobo) resolví un traslado para el Pre del Cerro,muy cerca de mi casa y menos "envolvente" que Alamar.
 Debia repetir el doce grado,pero ya estaba próximo a cumplir los diecinueve y no se me permitió por ley.En el Vedado habia repetido el onceno y hubiera querido estar allí hasta mi jubilación.Ya habia suspendido el noveno grado,pero a punto de tener que repetirlo,surgió una cosa que se llamó la Mundial y en medio de las vacaciones de Julio y Agósto me vi becado de nuevo.A golpe de mentiras y un fraude academico espantoso  logré vencer ese grado.
   De todas las travesuras en mi vida de estudiante hubo una que por peligrosa me gustaba más y que hoy miro con cierto respeto a la distancia.Los viernes esperaba a que cayera la noche y con mi bulto salia a caminar hasta que me perdia en los montes de Ceiba del Agua y Caimito,me montaba en guaguas que llegaron serme familiares,terminaba en Bauta,de ahí a La Lisa y algo más tarde en el Vedado.Dormia en el parque de H y 21 y al amanecer hacia una llamada telefonica a mi casa para comprobar que ya mi mamá se habia ido para el trabajo,entónces entraba triunfante por la puerta.Una véz adelanté mi fuga para un jueves,por lo que anduve dós noches sin rumbo en pleno Vedado hasta el deseado sabado.Ya en el pre y mientras trabajaba en el surco,divisé un trén que me llamó la atención,hice las averiguaciones pertinentes y al siguiente dia encabezé una excurción con varios compañeros de escuela.El tren llegaba hasta Guane!!  y a bordo se servian cervezas y bocaditos!
  En una ocasión me expulsaron de uno de estos campamentos de trabajo,se me trasladaba en una carreta a mi nuevo albergue,yo no estaba solo en aquél artefacto,entre los restantes alumnos hubo uno que  a pesar de no conocerme previamente se dirigió a mi y me dijo:
___"Oye socio,yo me voy a tirar de esta mierda y no paro hasta la Habana,lo unico que te pido es que me lleves la maleta para el nuevo campamento y me guardes una cama,nos vemos en trés dias".
Yo asentí y trés dias  después el tipo reapareció sonriente en el dormitorio,se hizo cargo de su maleta y la cama que le habia guardado,me dió las gracias y me contó de su viaje.Este fué el comienzo de una larga y profunda amistád que aún hoy compartimos Carlos Buzzi y yo.